La guionista, directora de cine y televisión, y cofundadora de la Asociación de Mujeres Cineastas y de Medios Audiovisuales (CIMA), ha fallecido a los 65 años, víctima de un tumor cerebral. Patricia Ferreira nos deja una veintena de películas y series, pero tan importante como eso, nos deja también «su interés por la memoria, la justicia social y la dignidad» —como puso de manifiesto en la creación de la propia CIMA—, en palabras de su colega y presidenta de la Asociación, Cristina Andreu.
«Entre su legado, lo más reciente es la serie de seis episodios Las abogadas, basada en la historia real de Lola González Ruiz, novia de Enrique Ruano, estudiante antifranquista muerto en 1969 a manos de la policía. Y abogada superviviente de la matanza de los abogados de Atocha en 1977, donde su marido, Javier Sauquillo, junto a cuatro abogados más, fue asesinado a tiros por unos ultraderechistas», recuerda Andreu en un artículo publicado en El País.
«He ido muchas veces a casa de Patricia y tiene una mesa llena de libros sobre esa época. Y sé que se ha entrevistado con todas las personas posibles para poder contar la historia de Lola. Ella sabía muy bien que sin memoria no se puede construir el futuro».
Desde Sé quién eres (2000), su debut en el largometraje de ficción, que le valió ser nominada a los Goya en la categoría de Mejor dirección novel (y se llevó el premio a la Mejor música original), su nombre siempre ocupó un lugar destacado dentro del cine español actual.
La película cuenta la historia de una joven psiquiatra que se encuentra, como primer paciente, a un hombre que sufre el síndrome de Korsakoff, que afecta la memoria y tiende a producir recuerdos falsos. La atracción que la psiquiatra siente por su fascinante paciente se mezcla con el miedo que también le provoca, pues todo lleva a suponer que ese pasado está lleno de violencia y hechos perturbadores.
Es decir, el argumento perfecto para que Patricia Ferreira desplegara su talento en un género en el que siempre se sintió muy a gusto: el thriller. «Hasta en las películas que no son un thriller propiamente dicho utiliza elementos para atrapar a un público que tenía muy presente», reflexiona Cristina Andreu.
O como la propia Ferreira dijo tras el estreno de su ópera prima: «Es un thriller de personajes en el que nos encontramos con dosis de acción, intriga y amor, sin olvidar la parte de la trama que se cuenta con claras implicaciones políticas».
A Sé quién eres siguieron El alquimista impaciente (2002), adaptación de la novela homónima de Lorenzo Silva; su participación en la colectiva En el mundo a cada rato (2004), junto a Javier Corcuera, Chus Gutiérrez, Javier Fesser y Pere Joan Ventura; Para que no me olvides (2005, una de las últimas películas en la que actuó Fernando Fernán Gómez); el documental Señora de (2010); Los niños salvajes (2013, Biznaga de Oro a la Mejor película y de Plata al Mejor guión en el Festival de Málaga, además de tres nominaciones a los Goya); y Thi Mai. Rumbo a Vietnam (2017).
Patricia Ferreira también fue «profundamente feminista», dice Andreu. De ahí que en 2006 se uniera a otras mujeres cineastas y profesionales del audiovisual para fundar CIMA, y permaneciera en su Junta Directiva hasta el final. «Para todas, Patricia es un referente en la asociación. Se involucró desde el principio en los Informes Anuales sobre la situación de la Mujer en el Cine, para demostrar con datos lo que ya sabíamos: que las mujeres no estábamos».
También era profesora de dirección en la ECAM, una viajera incansable y buena conocedora de Latinoamérica, y una apasionada de la literatura y la música.
Te echaremos de menos, Patricia.
Como bien dice Cristina Andreu, ya no podremos ir a pedirte consejo. Pero tu obra y tu ejemplo siguen ahí, muy dentro de todos los que amamos el cine.
Crédito de la imagen: foto del rodaje de Los niños salvajes. © losninossalvajes.wordpress.com