El cineasta portugués Miguel Gomes se ha alzado con el Premio a la Mejor dirección en la Sección Oficial de la 77ª edición del Festival de Cannes, cuya gala de premiación se celebró el último sábado 25 de mayo.
Lo ha conseguido con Grand Tour, su noveno largometraje, una coproducción de Portugal, Italia y Francia que recibió los fondos de ayuda del Programa Ibermedia al codesarrollo en la Convocatoria 2020.
Escrita por el propio director junto a Mariana Ricardo, Telmo Churro y Maureen Fazendeiro, la película se sitúa en Rangún, Birmania, en 1917, y narra la historia de Edward y Molly.
Edward, funcionario del Imperio Británico, huye el día en que finalmente iba a casarse con Molly, después de siete años de haber puesto la boda en suspenso. La fuga lo lleva a recorrer ciudades de Singapur, Vietnam, Japón y China. Decidida a encontrarlo, Molly sigue los pasos de su «grand tour» por toda Asia.
Los papeles principales de Grand Tour recaen en Gonçalo Waddington, Crista Alfaiate y Teresa Madruga. Junto a ellos actúan también Jani Zhao, Manuela Couto, João Pedro Vaz, Lang Khê Tran y Diogo Dória, entre otros.
Hace nueve años, Miguel Gomes ya había deslumbrado Cannes con su epopeya Las mil y una noches, una obra monumental de tres volúmenes y casi seis horas y media de duración total. Entonces, Cannes 2015, Las mil… se presentó en la Quincena de Realizadores.
De acuerdo con los críticos presentes en el reputado festival francés, Grand Tour se acerca en contenido y forma a su espléndida Tabú (2012), centrada en la historia de una mujer jubilada que, junto a la criada de su vecina muerta, se lanzaba a buscar a un hombre ligado a su vida pasada, cuando era la dueña de una granja en el monte Tabú, en África.
Es decir, otra película con aires de exploración antropológica y con el entorno (África/sudeste asiático) como protagonista.
Crédito de la imagen superior: fotograma de Grand Tour, de Miguel Gomes.