El 18º Festival de Cine de Málaga exhibió en la Sección Oficial de Documentales y fuera de concurso el estreno de la directora Mabel Lozano, la película Chicas nuevas 24 horas, que recibió apoyo del Programa Ibermedia en la convocatoria de 2014. Mabel presentó este documental de conciencia y compromiso social compartiendo además las historias de Yandy, Sofía, Ana Ramona o Estela. Las dos primeras menores de edad y todas ellas víctimas de trata con fines de explotación sexual desde sus propios países. Un largometraje rodado en cinco países (Argentina, Paraguay, Colombia, Perú y España) y que se adentra en la selva del alto Andino de Perú en Madre de Dios donde las mujeres son la misma mercancía que las drogas o las armas.
Desde la proyección de Chicas nuevas 24 horas en el Festival de Málaga las buenas críticas en medios de comunicación y webs de cine no han parado. Esto es una pequeña muestra de ello:
«‘Chicas nuevas 24 horas’ es una bofetada y un revolcón para las conciencias de todos. Pocas veces se tiene la oportunidad de percibir de manera tan clara lo que hay detrás de las luces de un burdel de carretera, tras las hogueras de los polígonos o bajo las ropas de las chicas que ofrecen sus cuerpos en las calles de todo el mundo». De Manuel Marlasca de ZoomNews.
«Lo que más inquieta de la película, no es ver como Mabel Lozano ficciona y hace que se describa en una master class lo rentable que es ese negocio, sino quedarse con la sensación, al final, de que no hay esperanza para las chicas que, por una u otra circunstancia, se meten un día en él y acaban con sus vidas truncadas para siempre. Como las cuatro protagonistas, chicas ya no tan nuevas cuyas historias por lo que se ve, jamás tendrán un final feliz». Crítica de la periodista Marta Robles.
«Mabel Lozano transita con maestría por la frontera. Aquella que el Maestro Sampedro nos aconseja: Desde la frontera pero sin fronteras. Removiéndonos la conciencia y los prejuicios. Con maestría en la dirección y en los datos del documental donde la mujer es un producto de consumo que se fabrica, se publicita, se explota y finalmente se desecha». Por Flor de Torres de El País.
«El filme nos muestra el entramado que provoca la desgracia de muchas mujeres y niñas (y lo lucrativo que resulta para la cadena de explotación). Está bien documentado y pone el dedo en la llaga en una de las grandes lacras de este siglo XXI. Hay muchos culpables pero Mabel expone los hechos de forma diáfana y didáctica para que el espectador sea consciente de que es necesario un cambio radical en la situación. No solo cine». Crítica de No Sólo Cine.
«Cualquier víctima ha de ser oída siempre en primera persona, con la atención, empatía y sensibilidad que nos expresa Mabel a través de sus voces. Son las palabras de estas cuatro supervivientes de la trata la guía del documental. Mabel nos sitúa frente a frente a las víctimas invisibles de la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Desnudas también en derechos». Por Flore de Torres en blog 20 Minutos.
«Hay algo debemos agradecerle a Mabel Lozano: Que haya rodado por fin un documental que evidencie que en este negocio las chicas no eligen ser parte de él sino que simplemente no han tenido otra elección que hacerlo». Por Nerea Sirera de Cineconella.
«Un documental que intenta penetrar en el ámbito comercial y así facilitar su difusión a todos los públicos, dejando a un lado la crudeza y rebajando el sensacionalismo inevitable en este tipo de trabajos sobre la prostitución y la explotación de la mujer». Por Alberto Medina López de Aforolibre.
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