La tercera película de Lucía Puenzo está basada nuevamente en una novela suya. Wakolda, estrenada hace unos días en el Festival de Cannes, recrea la figura real del médico nazi Josef Mengele durante su estadía en Argentina y ficcionaliza sobre sus experimentos genéticos con una niña con dificultades para crecer. El largometraje se estrenará pronto en España y América Latina.
Una familia argentina conoce en la Patagonia a un médico alemán que se presenta bajo el nombre de Helmut Gregor (Àlex Brendemühl) y se muestra fascinado por la “belleza perfecta” de Lilith (Florencia Bado), la hija de doce años que, por un problema hormonal, no ha crecido lo suficiente para su edad. Los padres, Eva (Natalia Oreiro) y Enzo (Diego Peretti), quedan a su vez seducidos por el carisma y los conocimientos del doctor Gregor, y aceptan que le aplique a la niña un tratamiento que le permita alcanzar su estatura normal. Con este argumento de thriller, Lucía Puenzo (XXY y El niño pez) aborda en su tercer largometraje la figura del médico nazi Josef Megele, el Ángel de la Muerte de Auschwitz, célebre por sus bárbaros experimentos científicos, de quien se sabe que vivió clandestinamente en Argentina entre 1949 y 1961. “La esencia de su ideología consistía en aspirar a la perfección biológica y a destruir todo aquello que podía alejarlo de ella”, ha dicho Puezo sobre su película y refiriéndose a Mengele. “Esa visión biomédica se situaba en el corazón del movimiento nazi, independientemente del contexto de la guerra”. Wakolda, una coproducción argentino-española con apoyo de Ibermedia y cuyo título alude a la fabricación de muñecas de porcelana, fue estrenada recientemente en el Festival de Cannes y fue aplaudida largamente por un público entre el que se encontraban Manohla Dargis, jefa de la sección de crítica cinematográfica del New York Times, y Thomas Sotinel, de Le Monde.