Las herederas, ópera prima del paraguayo Marcelo Martinessi, competirá en la Sección Oficial de la 68ª edición del Festival de Cine de Berlín, mientras que Marilyn, también debut del argentino Martín Rodríguez Redondo, lo hará en la sección Panorama. Para Las herederas, Martinessi recibió ayudas de Ibermedia al Desarrollo en la Convocatoria 2014 y a la Coproducción en 2015. Por su parte, Rodríguez Redondo recibió ayuda del Programa en 2015. Las dos películas competirán junto a otras 39 cintas iberoamericanas, lo que es un claro indicador del magnífico momento que vive hoy el cine de nuestros países. El desembarco iberoamericano en la Berlinale 2018 se completará con charlas y encuentros, como uno imprescindible sobre su distribución internacional más allá de los festivales, y la Reunión del Consejo Consultivo de la Conferencia de Autoridades Audiovisuales y Cinematográficas de Iberoamérica (CAACI).
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En una entrevista que le hicimos recientemente para esta web, Marcelo Martinessi describía así su película Las herederas: “Es la historia de una mujer de buena posición social que había heredado suficiente dinero como para vivir cómodamente. Pero a sus 60 años se da cuenta de que ese dinero ya no alcanza. Esta nueva realidad altera el equilibrio imaginario en el que vivía y la empuja a transformar un mundo que hasta entonces había permanecido inmóvil”.
Y añadía: “A lo largo de este relato, la herencia no tiene que ver sólo con el dinero. Tiene que ver con los valores, las formas, los límites y las restricciones que una mujer siente la obligación de trasmitir de generación en generación, como para perpetuar un sistema irracional. Esas herencias abstractas e ilógicas son con las que algunas mujeres deciden —a veces— romper. Y eso me parece muy atractivo”.
Las herederas es una coproducción de Paraguay, Brasil, Alemania, Uruguay y Francia, un proyecto sin duda de gran magnitud, aunque para Martinessi el desafío es que siga siendo una película pequeña, coherente con su país y con la manera en que él entiende su trabajo. Como su celebrado cortometraje La voz perdida, un trabajo sobre los campesinos paraguayos masacrados en Curuguaty con el que obtuvo el Premio al Mejor Cortometraje en la sección Horizontes de la 73ª edición de la Muestra Internacional de Arte Cinematográfica de Venecia.
Las herederas competirá por el Oso de Oro, máximo galardón del festival berlinés.
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Marilyn, hostilidad y deseo
Por su parte, Marilyn, la ópera prima del argentino Martín Rodríguez Redondo, narra la historia de Marcos (el actor Walter Rodríguez en su debut cinematográfico), un adolescente que se traviste en secreto cuando está solo.
Marcos y su familia son granjeros en una estancia de las afueras de Buenos Aires. Mientras el padre y el hermano se encargan de las labores más pesadas, él prefiere quedarse en casa con su madre. Todos tienen pensado un futuro para él, pero Marcos espera la llegada de los carnavales, cuando podrá mostrarse ante todos tal y como realmente se siente: un travesti.
La repentina muerte del padre deja a la familia en una situación vulnerable. El patrón del campo los presiona para que se vayan y la madre presiona a Marcos para que se ocupe de las tareas que realizaba su padre en la granja. En el pueblo los otros adolescentes lo llaman Marilyn. Es su apodo, un nombre que expresa la discriminación de la que es víctima, pero también el deseo que despierta en algunos.
Basada en hechos reales, Marilyn es una coproducción de Argentina y Chile, y además de competir en la sección Panorama buscará alzarse con los premios GWFF a la Mejor Ópera Prima y el Premio Teddy que galardona lo mejor del cine LGBT.