Javier Corcuera, el director de La espalda del mundo o Invierno en Bagdad, acaba de estrenar su nueva película documental. Kachkaniraqmi (Sigo siendo) es un viaje musical que empieza en la amazonía peruana, atraviesa los Andes y termina a orillas del Océano Pacífico, contando las historias de los principales músicos de cada región. Pronto llegará a salas europeas.
Javier Corcuera, o realizador de La espalda del mundo ou Invierno en Bagdad, acaba de estrear o seu novo filme documental. Kachkaniraqmi (Sigo siendo) é uma viagem musical que se inicia na selva amazónica peruana, atravessa os Andes e termina nas margens do Oceano Pacífico, contando as histórias dos principais músicos de cada região. Em breve, chegará às salas de cinema europeias.
En quechua, ese idioma lleno de ternura de los Andes, hay un saludo que se usa sobre todo cuando dos personas queridas se reencuentran después de mucho tiempo: «¡Kachkaniraqmi!». Uno de sus significados es «sigo siendo», pero también puede entenderse como «aquí estoy otra vez» o, con ese singular tan plural de la gente andina, «pese a todo, seguimos siendo», «todavía estamos aquí». Javier Corcuera, el director de La espalda del mundo (Premio de la Crítica Internacional del Festival de San Sebastián) o Invierno en Bagdad (Premio del Festival de Málaga y al mejor documental en el Festival de Los Ángeles), ha convertido ese saludo quechua en un documental sobre los diversos géneros de la música peruana que es también un canto a la vida. La película está concebida como un viaje que empieza en la selva amazónica de ese país sudamericano, continúa a través de los Andes y termina en el mar del Océano Pacífico. Como la trayectoria de un río, es también una metáfora de la ruta migratoria que han seguido millones de peruanos desde los años cincuenta: del campo a la ciudad, de las provincias a Lima. Kachkaniraqmi (Sigo siendo) «habla de esas personas que llegaron a la gran ciudad y nunca se desprendieron de su identidad, que siguieron cantando en su lengua, que mantuvieron una manera única de tocar la guitarra, el violín, el arpa, el cajón, una manera de contar sus historias, de decir quiénes son», dice Corcuera. «Desde los grandes maestros de nuestra música, la película cuenta la diversidad de la cultura peruana, la complejidad del país, su pasado y su presente». Para él, que ha pasado una buena parte de su vida en España, es además una forma de reencontrarse con los suyos, de saludar a sus viejos amigos diciéndoles «kachkaniraqmi», sigo siendo, aquí estoy de nuevo. La película, una coproducción peruano-española con ayuda de Ibermedia, ya fue estrenada en Perú y pronto llegará a salas europeas.
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Em quechua, essa língua cheia de ternura dos Andes, existe uma saudação que se usa sobretudo quando duas pessoas queridas se reencontram ao fim de muito tempo: “Kachkaniraqmi!”. Um dos seus significados é “continuo a ser”, mas também pode ser entendido como “aqui estou outra vez” ou, com esse singular tão plural das gentes andinas, “apesar de tudo, continuamos a ser”, “ainda estamos aqui”. Javier Corcuera, o realizador de La espalda del mundo (Prémio da Crítica Internacional do Festival de San Sebastián) ou Invierno en Bagdad (Prémio do Festival de Málaga e Prémio para o melhor documentário no Festival de Los Angeles), transformou esta saudação quechua num documentário sobre os diversos géneros da música peruana, que é também um hino à vida. O filme está projetado como uma viagem que se inicia na selva amazónica desse país sul-americano, continua através dos Andes e termina no mar do Oceano Pacífico. Como a trajetória de um rio, é também uma metáfora da rota migratória que milhões de peruanos seguiram desde os anos cinquenta: do campo para a cidade, das províncias para Lima. Kachkaniraqmi (Sigo siendo) fala dessas pessoas que chegaram à grande cidade e que nunca se desprenderam da sua identidade, que continuaram a cantar na sua língua, que mantiveram uma forma única de tocar guitarra, violino, harpa, cajón, um modo de contar as suas histórias, de dizer quem são”, afirma Corcuera. “Através dos grandes mestres da nossa música, o filme conta a diversidade da cultura peruana, a complexidade do país, o seu passado e o seu presente”. Para ele, que passou grande parte da sua vida em Espanha, é igualmente uma forma de se reencontrar com os seus, de saudar os seus velhos amigos dizendo-lhes “kachkaniraqmi”, continuo a ser, aqui estou novamente. O filme, uma co-produção peruano-espanhola com o apoio da Ibermedia, já estreou no Peru e, em breve, chegará às salas europeias.